SPRINT FINAL

Vamos a la jornada 15, e iniciamos lo que en las carreras de fondo (atletismo, caballos, autos, etc.) se conoce como sprint final. Aquí es justo cuando todos comienzan a apretar y buscan ejercer influencia sicológica sobre el líder. Así surge el viejo adagio popular que dice “caballo que alcanza, gana”. Sin embargo, en este caso, no queremos que esto suceda. Debemos revertir la presión y trasladársela a nuestros perseguidores, para que sean ellos los que reciban una fuerte y pesada dosis de impotencia, desánimo, desgaste, y fatiga mental.

Como lo hacemos? Pues, hay que seguir ganando! El Real depende de sí mismo para ganar las vueltas, y en esta persecución, cada triunfo nuestro, marca el paso y genera inmediatamente un sentimiento de imposibilidad al rival, que cada vez les dura una semana más, y esa agonía los desgasta emocionalmente.

Van 5 juegos ganados al hilo. Estamos claros en que no siempre se pueden ganar los partidos. Sin embargo, no menos es cierto, que lo que sí se puede hacer, es salir con la disposición, planteamiento, y actitud hacia el triunfo. ¡No queda menos! Esto es lo que la GRAN afición aurinegra espera.

Ahora bien, la agenda que nos queda no es nada fácil. Salimos a Santa Bárbara, recibimos al Olimpia, vamos a Comayagua, y cerramos en La Ceiba. Son 3 salidas y un juego duro de local. Ojalá y el equipo tome los partidos uno a uno, y los sepan resolver implacablemente. Es como un rompecabezas de mil piezas; cada juego es una pieza, y de repente ya hasta el final veremos el dibujo completo. En esta analogía, el “dibujo” es la Copa 10! Juego a Juego muchachos.

Para empezar, hay que ir a sacar el resultado a Santa Bárbara. Aunque el torneo anterior nos costaba puntuar fuera de casa, este año parece que es todo lo contrario. Estos partidos, y más con equipos chicos, son duros. Y es que es su oportunidad de salir a “morirse” a la cancha, para obtener algo de relevancia como “matagigantes”. Súmele que la cancha no es del todo buena, y menos aún con las fuertes lluvias que han caído. No va a ser un juego técnico; no con esa cancha. Hay que tener la inteligencia y entereza física para jugar en estas condiciones. Otro aspecto es que debuta Edwin Pavón, y ya de todos es sabida su capacidad estratégica, y que le cae como anillo al dedo particularmente a los equipos chicos.

La Makina llega con deseos de seguir en la punta. Existe motivación (aunque sea momentánea) en los 4 llamados a la selección. Lástima que la desfachatez del Sr. Rueda, nos haga pensar que solo los llevará a pasear. Por eso mismo, ahora es cuando tienen la palabra los jugadores, para demostrar con creces, que pueden ser parte de la titularidad de una selección.

Carlos Alberto y Mario César; ustedes dos son verdaderamente GRANDES. Ya quisiera cualquier institución tener dos caudillos de su calibre. Todos sabemos los intereses que se juegan en la selección, y justamente por eso es que no han sido tomados en cuenta. Todo Honduras (y los que viven fuera) lo sabe. Animo líderes, y más bien que este desaire se transforme en un fuerte vendaval que derrumbe rivales, que marque historia, que haga feliz la Mega, y que sea un mensaje claro para Rueda y su comparsa.

Marito, tienes que salir a ganar. Estos equipos como el Real Juventud, hay que “matarlos” temprano en el juego, ya que si no lo haces, se crecen y te complican. Muchos aficionados van para allá; no en balde es la mejor afición de Honduras. Piensen en todo lo que ustedes representan en nuestros henchidos corazones amarillos y negros hasta la tambora!

Vamos por la 10! La copa 10; pero no la casilla 10…………..

Carlos E. Cáceres